Con profunda alegría y orgullo compartimos que CADI ha sido distinguido con el Premio “Campeones de la Salud”, otorgado por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP). Este galardón reconoce el liderazgo, compromiso y labor humanitaria con impacto en la salud pública en las Américas y el Caribe, destacando a personas e instituciones que promueven transformaciones estructurales en favor de la justicia, la equidad y la inclusión.
¿Qué es CADI?
CADI —Centro de Atención al Desarrollo Integral— es una organización civil mexicana con más de tres décadas de trayectoria, dedicada a brindar atención, acompañamiento y formación a personas con discapacidad intelectual a lo largo de todo su ciclo de vida. Su propuesta se fundamenta en una visión humanista e inclusiva, orientada al respeto irrestricto a la dignidad de la persona, la autodeterminación, la participación activa y la construcción de comunidades verdaderamente incluyentes.
Además de sus programas formativos, CADI realiza incidencia en políticas públicas, procesos educativos y acciones de concientización social, siendo hoy un referente en México y América Latina en el acompañamiento ético y pedagógico a personas con discapacidad intelectual.
Un reconocimiento al compromiso con la dignidad
La entrega del premio fue encabezada por el Dr. Eduardo Lazcano, director del INSP, y recibida por Gregorio Katz, presidente de CADI, y Mina Katz, consejera fundadora. La distinción reconoce su labor transformadora en favor de los derechos humanos, la equidad, y el diseño de entornos protectores y amorosos para quienes históricamente han sido excluidos.
¿Quiénes son los hermanos Katz?
Gregorio y Mina Katz han dedicado su vida a promover una pedagogía que coloca en el centro la voz, el rostro y la historia de las personas con discapacidad intelectual. Su legado trasciende lo institucional: representa una forma de estar en el mundo desde el cuidado, la ternura, el acompañamiento y la justicia.
Como líderes, formadores y referentes, han construido puentes entre el conocimiento académico, las experiencias comunitarias y la espiritualidad del compromiso. Su propuesta se alinea profundamente con los valores que promovemos como Escuela jesuita.
La metodología KATZ: educar con sentido, incluir con amor
La metodología KATZ es el modelo de acompañamiento desarrollado por CADI. No se trata solo de una técnica, sino de una filosofía educativa que cree en la capacidad de todas las personas para aprender, elegir, aportar y transformar. Esta propuesta apuesta por la inclusión plena, el respeto mutuo, la ternura como herramienta pedagógica y la participación real de las personas con discapacidad en la vida social, educativa, laboral y comunitaria.
Es, en esencia, una metodología que encarna la educación integral y humanista que también promovemos en la Escuela Carlos Pereyra: formar personas conscientes, competentes, compasivas, comprometidas y contemplativas en la acción.
¿Por qué esto es relevante para la Escuela Carlos Pereyra?
En la Pereyra, entendemos la educación como un acto profundamente ético, comunitario y espiritual. Reconocer a instituciones como CADI y a figuras como los hermanos Katz es reconocer que nuestra misión educativa no está aislada del tejido social, sino que forma parte de un compromiso más amplio por la transformación del mundo desde el amor, la justicia y la dignidad.
Este reconocimiento a CADI:
🔹 Refuerza nuestro compromiso con la inclusión como un principio no negociable de nuestra cultura institucional.
🔹 Nos recuerda que la excelencia humana y académica solo es posible cuando nadie queda fuera.
🔹 Nos inspira a seguir construyendo espacios seguros, diversos y justos, donde cada estudiante —con sus talentos y desafíos— sea acogido, acompañado y valorado.
🔹 Nos vincula con otras experiencias pedagógicas y sociales que, como nosotros, educan para servir, para amar, y para transformar la realidad desde el Magis.
CADI y la Escuela Carlos Pereyra comparten la convicción de que la educación es un camino para la justicia, la sanación y la esperanza. Celebramos este reconocimiento como una oportunidad para seguir aprendiendo, tejiendo redes y creciendo en comunidad.